Has de saber de mi como derrotada infiel por mi propio amo. Por lo tanto, debes mostrarte al mundo como criatura repleta de amor. Un cuerpo a la deriva es una única deserción.
Hoy miro a mi al rededor. Y solo veo un todo que no vale nada. Vivo mirando a los ojos de personas vacías, estoy tan perdida en el único lugar que reconozco que todo aquello que de antes conocía la existencia es capaz de sorprenderme por su vivir. ¿Estoy equivocada? ¿O demasiado lejos de la realidad? Todo ardiendo, quemándose, derritiendo un puñado de almas predestinadas a la perdición. ¿Correr? Es inútil, si estás condenado, no puedes escapar de manera alguna. Confesor de las tragedias del hombre, acechando en nuestra conciencia. La última muerte clama los por siempre perdidos. Es el año de la muerte, ejecutando sus instrumentos, abusivo, soberano, sigiloso. Tocándonos con facilidad. Infectando búsquedas en un instante, abrasadora cosecha de enfermedad. Yo solo soy una espectadora, una defensora documentando la pérdida. Revoloteando ufana. Todo esto no me concierne todavía, pero estoy a tono con tu alma solitaria. Una vez que estás en esta noche, todos tus pensamientos serán estables. Olvida todas tus necesidades. Pierde cualquier indicio de control. Desencadena los colores frente a mis ojos. Ayer el dolor y mañana las blancas mentiras. Y volverás a partir del fuego. Es una locura, es el ojo que todo lo ve y que todo lo siente.Puedes tratar de correr, puede que llegues a escapar. Pero yo, yo me fundiré aquí conmigo misma.
Ni lo material ni lo espiritual te perteneció nunca. Ahora eres un pobre desalmado, que vaga como puede por un mundo en llamas, abrasándote a ti mismo aunque estés gélido realmente. Eso es, muerte es lo que pides, tu muerte ya. Sabes que la mereces, y ansías morir ya para acabar con ese sufrimiento. ¿Pero sabes? No será así. Podré dejarte en vilo, rodeado de las arduas llamas del infierno sin un mañana al alcance de tu vista. Podré dejar que se derritan tus retinas mientras gritas por tu muerte, dejarte sufrir hasta tal punto que dejes de sentir un dolor humano, pero siempre manteniéndote con una mínima rayita de vida, para poder darte más de tu propia medicina.
No hay comentarios:
Publicar un comentario