Aunque en realidad no haca falta que espere, eres tan efímero y satisfactorio como una simple calada. Y yo veo la espina retorcerse a tu lado, y espero por ti. Y espero sin ti. No puedo vivir ni contigo ni sin ti. Lo diste todo, pero quiero más, te estoy esperando. Y te mandaste a la mierda, y ahora soy yo quien te tiene, sin nada que ganar, ni nada que perder.
Juro, y perjuro, que por ti esperaré al fin del mundo si hace falta, pero no tengo pensado irme de esta vida sin haberte robado un beso o sin haberme deshecho en tu regazo. Ahora leo esto, escuchando una de esas miles de canciones que se me asemejan a tu voz, y pienso 'es poco, pero dice todo'. Y las palabras que le faltan a esta entrada, no hace falta ponerlas, tú ya sabes cuánto te necesito cada día de mi vida.
Villano, amarte siempre es poco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario